Josephine Baker: de esclava a diosa.


Josephine Baker. Cuba 1950. https://pinceladasdelpasado.blogspot.com
Josephine Baker. Cuba 1950

Ser mujer, negra, bisexual, libre, innovadora, luchadora por los derechos civiles de los negros, pacifista, activista antifascista, espía, madre adoptiva de 12 hijos, cantante, bailarina y actriz cuando todo esto no estaba demasiado bien visto, no debe ser muy fácil. Cualquiera diríamos que se trata de una superwoman reconocida por todo el mundo con múltiples honores. Sin embargo, seguro que para muchos es una auténtica desconocida: Josephine Baker. ¿Os suena?

La primera vez que yo oí hablar de ella fue a mi abuela paterna, la yaya Victorina. Yo entonces era muy niña y no entendía muy bien todo su mérito, pero el tiempo se encargó de arreglar eso. 

Josephine Baker, una niña sin infancia.

Freda Josephine McDonald nació en los Estados Unidos (San Luis-Misuri) el 3 de junio de 1906 en una familia muy pobre. Sus padres se divorciaron enseguida y su madre se volvió a casar pronto. Josephine, alternaba la escuela con trabajos domésticos en casas de familias pudientes en las que también trabajaba su madre. En estas casa la trataban muy mal, abusaban de ella, le pegaban, -uno de los jefes le metió las manos en agua hirviendo porque no había hecho algo bien y tuvo que ser hospitalizada-, o le hacían compartir comida, cama y techo con un perro de tres patas y un gallo blanco en un lóbrego sótano. Quizás entonces nació su amor por los animales, con los que convivió toda su vida. Tuvo perros, gatos, serpientes, un cerdo y varios más, pero quizás el más famoso sea su guepardo Chiquita.

Con 11 años fue testigo de los disturbios raciales de San Luis (Illinois) en 1917. En una sociedad sustancialmente racista, el detonante de esta rebelión fue la huelga de trabajadores blancos de la industria, sobre todo del aluminio. Los empresarios contrataron mano de obra negra y barata y los blancos se rebelaron. Atacaron a los negros y quemaron sus casas. La revuelta se saldó con unos 150 trabajadores negros muertos (las estadísticas dicen de 50 a 200), más de 6000 sin hogar y grandes pérdidas económicas. Seguramente la pequeña Josephine se propuso entonces a no dejarse pisotear y ser una mujer negra y libre.

El despegue de una gran mujer.A los 13 años la casaron. Este matrimonio apenas duró un año.  


Con 14 ganó un concurso de baile y empezó su vida artística, primero con espectáculos callejeros y luego en una pequeña compañía. Dejó a su marido y fue a comerse el mundo. Su gracia, sus maneras cómicas de interpretar el baile (hacía números bizqueando y haciendo "el ganso" a lo Lina Morgan), su exuberancia, sus coloridos espectáculos en los que introducía elementos culturales y musicales africanos y su ligera indumentaria fueron ganando adeptos. Estando de gira por Filadelfia, conoció a un guitarrista de blues William Baker, que sería su segundo marido y del que tomaría su apellido artístico. Este matrimonio duró apenas dos años y cuando se separaron, Josephine no había cumplido los 17. 

A lo largo de su vida se casó 6 veces. A pesar de tanto marido, también mantuvo múltiples amantes y relaciones lésbicas a lo largo de su vida, incluso con personajes  famosos y conocidos, que llevaba con absoluta discreción, y varios abortos, uno de los cuales la dejó estéril para siempre.

Era una chica ambiciosa, quería triunfar en Broadway, pero no tiene suerte y es rechazada en numerosas ocasiones por enorme racismo que reinaba en el mundo de la farándula y las demoledoras críticas de la prensa de Nueva York. 
La Revue Nègre


Josephine Baker: el nacimiento de la diosa negra.

Sin embargo tiene la oportunidad de conocer a Donald J. Reagan, agregado comercial de la embajada de Estados Unidos en París, que se fija en ella y le propone que se vaya con él a Francia para montar un espectáculo a su medida. El espectáculo La Revue Nègre, en el que se mezclaba Jazz, música negra y salvaje (llegó a actuar con su guepardo Chiquita que se sublevó un poco para susto de la orquesta), el Charleston de su tierra natal y un vestuario muy exótico pero prácticamente carente de tela, faldas muy cortas (tenía una falda hecha solo de plátanos) y el torso desnudo, llevó al público a pasar del escepticismo y el escándalo a la admiración y el disfrute de los locos años 20. 

Se convierte en una indiscutible y fulgurante estrella que se pasea por el mundo con un elegante guepardo de mascota. 

Se casa por tercera vez, abre su propio teatro -Chez Joséphine-, canta, baila, es modelo fotográfico, hace giras y películas. En 1927 rueda La Sirène des Tropiques, siendo la primera mujer afroamericana en actuar en el cine (a lo largo de su vida participaría en 11 películas). En esa época contrata como secretario a Georges Simenon, el genial escritor belga de novelas policíacas y padre del comisario Maigret, con el que parece que tuvo un affair. Es la actriz del espectáculo mejor pagada de toda Europa, una de las mujeres más fotografiadas del mundo, musa de gente tan importante como Picasso o Hemingway y es apodada como La venus de bronce, La perla negra o La diosa de ébano.

1926 Bailando Charleston 

En 1936 vuelve a su tierra, los Estados Unidos, pero allí la mente de la gente es más estrecha y más racista que en Europa. Sus espectáculos eran tachados de promiscuos y escandalosos y ella es rechazada por la sociedad bien-pensante, que incluso llega a decir que “bailaba como un mono”. Hasta le vetan la entrada en algunos lugares públicos, hoteles y restaurantes o le hacen pasar por la puerta del servicio, por “donde pasan los negros”. Ante tal rechazo, hace de nuevo el petate y vuelve a Francia. 

En 1937 se casa con su cuarto marido, un rico empresario judío, y con ello adquiere la nacionalidad francesa. Josephine no solo era una exótica vedette, sino que era una mujer muy valiosa y muy inteligente que, con su talento, su personalidad y su simpatía supo ganarse el cariño y el favor de la alta sociedad parisina. Entró en los círculos más selectos por derecho propio y se codeó y mantuvo relaciones y amistad con importantes personalidades de todos los ámbitos: culturales, políticos, artísticos o empresariales.
Subteniente Josephine Baker. 1948

La  subteniente Josephine Baker, una heroína de guerra.

Cuando estalla la Segunda Guerra Mundial, Josephine no se queda quieta. Hace un paréntesis en su vida artística y se enrola en la Resistencia Francesa donde es Subteniente Auxiliar de las Fuerzas Aéreas y agente de contraespionaje antinazi (utiliza partituras musicales para ocultar mensajes con tinta invisible y pasa fotos prendidas en la ropa interior). Colabora con la Cruz Roja y canta y actúa para animar a las tropas. Al instalarse el gobierno en Vichy tiene que emigrar al sur del país, donde acoge a refugiados. Viaja a España y a Marruecos donde actúa para los soldados y lleva mensajes de la Resistencia. Estando en África tuvo un aborto espontáneo que se complicó con una infección posterior la cual hizo que tuvieran que extirparle el útero: no podría tener hijos nunca. Esto fue una de las grandes tristezas de su vida que, con el tiempo, compensaría adoptando 12 hijos.

1937 Cantando para la Resistencia Francesa

Como tenía acceso a altos mandatarios, embajadas y personalidades políticas y militares y, por motivo de su profesión, salvoconductos entre países, pudo obtener valiosísima y decisiva información para la victoria contra los nazis. Su encomiable y heroica labor fue recompensada con las Medallas de la Resistencia y de la Legión de Honor, que le puso el mismísimo De Gaulle.


Al final de la guerra, en 1947, se casó con su quinto marido el director de orquesta Joe Bouillon. Con él adoptó a la mayoría de sus 12 hijos a los que ella llamaba La Tribu del Arco Iris y toda la familia se establece en el Castillo Les Milandes en la Dordoña francesa. Continuó con su profesión en espectáculos, giras y cabarets a los que se llevaba a sus hijos para demostrar al mundo que el amor y la armonía está por encima de las etnias. Sin embargo, termina divorciándose de Bouillon, los gastos de su numerosa familia y del castillo son cuantiosos y cae en la bancarrota. 

Josephine Baker y sus 12 hijos en 1969
Entre 1950 y 1966 viaja cinco veces a Cuba donde, a la vez que es admirada y querida por el pueblo cubano (que la apoda La Platanitos) que ven en ella, no solo a la artista que es, sino a una luchadora en contra de las injusticias, es rechazada por los sectores oficiales, hoteles (le niegan el alojamiento diciendo que no hay habitaciones) o emisoras de radio (vetan sus canciones), ya que la embajada norteamericana le había declarado persona non grata. Sin embargo, en sus dos últimos viajes la cosa cambia,  e incluso es invitada, junto a sus doce hijos, por Fidel Castro para pasar unos días en la playa, cerca de La Habana -1966-.

Josephine Baker en el castillo de Milandes. 1961

Luchadora por los derechos civiles de los negros.

A principios de los sesenta, vuelve a Estados Unidos para unirse a los movimientos afroamericanos por la igualdad de derechos civiles, promovida por el gran hombre y pacifista Martin Luther King (en este blog). Efectuó varios espectáculos para recaudar fondos para la causa y participó en la famosa Marcha sobre Washington el 28 de agosto de 1963 en la que Luther King pronuncia su famoso discurso Yo tengo un sueño. Josephine Baker es la única mujer que se dirige al público ese histórico día. Cuenta la historia de su  terrible infancia y las humillaciones sufridas por su color y es aplaudida a rabiar.

El fin de una intensa vida.

Aunque su intención después de una gira mundial fue la de retirarse del mundo del espectáculo para vivir con sus 12 hijos en el Castillo Les Milandes, tuvo que subirse esporádicamente a las tablas por problemas económicos. Sin embargo estas galas no eran suficiente y tuvo que ir vendiendo muebles y propiedades para salir adelante. En ocasiones también fue ayudada por su amiga la princesa de Mónaco Grace Kelly, tanto económicamente como preparándole espectáculos. La salud de Josephine empezaba a resentirse y los problemas de corazón y alguna embolia le daban un susto de vez en cuando.

En 1973 se casó con su último marido y en 1975 da su último espectáculo en el Teatro Bobino de París, lleno hasta la bandera, para conmemorar sus 50 años sobre las tablas. Cuatro días más tarde sufre un derrame cerebral y muere dos días después, el 12 de abril, cuando aún estaba recibiendo regalos y felicitaciones. 

1955 París. Josephine Baker, una diosa negra.

El pueblo francés se volcó y la despidió en un funeral con honores militares por las calles de París y su cuerpo reposa en el cementerio de Mónaco.



Fotos: Wikimedia Commons
Vídeos: You Tube

Bibliografía:

Internet:

* wikipedia.org/wiki/Joséphine_Baker
* biografiasyvidas.com/biografia/b/baker_josephine.htm
* bbc.com/mundo/noticias-59439743
* historia.nationalgeographic.com.es/a/josephine-baker-diosa-ebano_15681
* mujeresvalientes.es/josephine-baker-primera-estrella-pop/
* blogs.20minutos.es/1-de-cada-10/2020/03/30/josephine-baker/
*elespanol.com/social/20180513/increible-historia-josephine-baker-bailarina-cantante-antinazis/306969734_0.html

Comentarios

  1. Interesante artículo para descubrir a esta gran mujer, referente en la lucha contra el racismo e icono musical.

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