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Mostrando entradas de mayo, 2019

Vicente Ferrer Moncho, un hombre bueno.

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“Mi trabajo consiste en conseguir sueños imposibles” Foto de Anna para Flickr A veces, cuando pensamos que “el hombre es un lobo para el hombre”, nos sorprende una gran persona que hace que no perdamos la esperanza en el corazón humano. Uno de estos es Vicente Ferrer Moncho, a veces conocido como El Padre Ferrer . Con él, la Iglesia, que tanto habla de bondad, generosidad y amor, ha tenido la oportunidad de enriquecerse con un santo de verdad, y sin embargo, lo dejó pasar... Vicente Ferrer, la necesidad de hacer algo útil. Vicente Ferrer nació el 9 de abril de 1920 en Barcelona. Siendo un chaval de 16 años, tuvo que enrolarse en el ejército republicano, en la llamada Quinta del Biberón y, a tan temprana edad, conoció el dolor de la derrota y las miserias de un campo de concentración. Cuando terminó la guerra empezó la carrera Derecho en la Universidad. No obstante, en su deseo de ayudar a los pobres, floreció su vocación religiosa y en 1944, abandona la carrer

La Campana Gorda de Toledo

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“Cuenta la tradición…” Campana Gorda de Toledo. Foto de  leytol  para Flickr El cardenal de Toledo, Luis Antonio de Borbón, hijo de Felipe V y hermano de Carlos III, quería, para la Catedral Primada de España, la campana más grande de toda la cristiandad. Estudiando el proyecto con el canónigo de la catedral Andrés de Munárriz, pensaron que el lugar idóneo para colocarla era en la torre donde estaba la campana de San Eugenio, también muy grande, pero que no daba buen sonido. Así, sin reparar en gastos, encargó su fundición al orfebre y campanero de la catedral, el cántabro Alejandro Gargallo. Durante más de dos años el maestro Gargallo trabajó en la campana, una enorme campana de 2,29 metros de altura, 9,17 de circunferencia, 2,93 de diámetro y entre 7.500 y 14.000 kilos (no se ponen de acuerdo con el peso) y  que el pueblo esperaba con expectación. Parece ser que el taller de fundición estaba en la cuesta de San Justo, no muy lejos de la catedral, pero el penoso traslado duró